Sífilis también llamada lúes (significado latino de "epidemia") o chancro duro es causada por una bactéria con el nombre Treponema pallidum.

La sífilis es una enfermedad venérea muy pérfida y puede tener efectos realmente espantosos. Por suerte, con antibióticos especiales se la puede tratar bien y aún curar, siempre que haya sido reconocida a tiempo. Y justamente esto no es tan sencillo, porque la sífilis se desarrolla en tres fases diferentes.

Comenzando, en la primera fase, se presenta como una llaga dura (chancro) y sin dolores. Muy a menudo ni la percibes y además desaparece sin tratamiento.

En la segunda fase, un par de semanas más tarde, aparecen granos en la piel, que tienen la apariencia de sarampión, o manchas más grandes café rojizas o verrugas supurantes. En las heridas mismas, en la secreción de las verrugas y en la sangre se encuentran especialmente muchas bactérias de sífilis. En esta fase de la sífilis basta un contacto con la piel para poder contagiarse.

En la tercera fase, que puede durar muchos años ya no hay más señales exteriores de sífilis. Además la persona infectada ya no está contagiosa. Sin embargo las consecuencias pueden ser graves: los nervios son dañados y puedes quedarte demente o ciego.

Necesariamente tienes que consultar a un médico, si percibes una erupción en la piel o una llaga. O también si has notado llagas o heridas con secreciones en la persona con la que tuviste sexo. Dile al médico que te examine de sífilis.

Usando condón puedes protegerte de sífilis, pero por desgracia no del todo. Sobretodo tienes que evitar contacto con heridas, sangre y secreciones de heridas. Igualmente importante es que examines meticulosamente a tu cuerpo. Entonces podrás ir a tiempo al médico, en caso de cambios sospechosos.